Por Jenn Gidman
Imágenes de Felipe Prieto
Los niños de hoy en día saben cómo trabajar el foco. Felipe Prieto utiliza sus zooms Tamron 28-75mm F/2.8 G2 y 70-180mm F/2.8 para capturarlos.
La trayectoria fotográfica de Felipe Prieto no comenzó en el estudio de Filadelfia en el que ahora se instala, sino en la Universidad Jorge Tadeo Lozano de su Colombia natal, donde dio el salto al cine por primera vez en 2015. Su arte se concentró inicialmente en el cine, y en dar vida a su misión de ayudar a las personas a entender el mundo que les rodea.
"Tenía un negocio bien establecido en Bogotá, y en los años siguientes lo amplié para incluir el retrato", dice Felipe. "Principalmente fotografiaba sujetos adultos, especialmente actores. Sin embargo, cuando llegué a Estados Unidos en 2019, mis primeros clientes fueron dos niñas, y eso cambió gran parte de mi enfoque de adultos a niños. Me di cuenta de que disfrutaba haciendo retratos de niños y viendo cómo evolucionaba la familia a lo largo de los años."
El trabajo le sienta bien a Felipe, y se nota en sus retratos, que complementa con fotografía arquitectónica, publicitaria y de bellas artes. "La madre de esas niñas me ha dicho que lo que más aprecia de mi trabajo es que soy capaz de mostrar a sus hijas en su luz más auténtica", dice. "También me encanta trabajar al aire libre. Los niños parecen estar más relajados cuando no están constreñidos por las paredes de un estudio."
Para sus sesiones de retrato, Felipe utiliza el Tamron 28-75 mm F/2,8 DI III VXD G2 y el 70-180 mm F/2,8 DI III Teleobjetivo VXD zooms. "Cuando cambié a un sistema de cámara sin espejo de Sony hace dos años, investigué mucho sobre qué objetivos comprar", explica. "Primero elegí el 70-180 mm, porque me iba de viaje y quería un objetivo con una gama versátil de distancias focales. La apertura mínima de F/2,8 también me atrajo, porque sabía que no tendría que preocuparme tanto por las condiciones de iluminación. Ahora, para retratos, uso este objetivo cuando quiero crear una foto más íntima".
A continuación, Felipe adquirió el 28-75 mm. "Quería un objetivo que diera un poco más de juego", dice. "Me permite incluir mucho más del entorno. Además, ambos objetivos incorporan un enfoque automático superrápido con la función de seguimiento ocular de Sony, que facilita mucho fotografiar a niños que se mueven mucho."
CONSEJOS RÁPIDOS DE FELIPE
Conoce a los niños de antemano.
Aunque sólo sea una videollamada, es importante ponerse en contacto antes de la sesión para conocer la personalidad de cada niño. ¿Es tímido? ¿Les gusta jugar delante de la cámara? Conocer estos detalles me ayuda a planificar la sesión, desde la búsqueda de lugares que creo que les interesarán hasta la forma en que voy a fotografiarlos.
Asegúrate de que los niños vayan cómodamente vestidos.
Después de una reunión inicial con los niños y sus padres, saco una guía de vestuario que he elaborado sobre lo que se registra bien, porque no todo queda bien ante la cámara. Pero tan importante como que se vean bien es que los niños se sientan bien con lo que llevan puesto, ya sea algo elegante o informal.
28-75mm, 75mm, F/2.8, 1/640 seg., ISO 250
A veces combino trabajos para clientes publicitarios con mis retratos. Tengo un cliente que fabrica botas de colores, así que recluté a unos cuantos jóvenes para que las modelaran. Estaban entusiasmados. Ese fue un ejemplo de una sesión mitad retrato/mitad cliente profesional en la que pude fusionar esos dos mundos.
28-75mm, 28mm, F/2.8, 1/4000 seg., ISO 400
28-75mm, 28mm, F/2.8, 1/1250 seg., ISO 250
28-75mm, 28mm, F/4.0, 1/640 seg., ISO 400
Prepara tus poses.
Tengo una guía en formato PDF que envío a los padres antes de la sesión. La guía incluye varias poses sencillas, para que mamá y papá sepan lo que vamos a hacer, e incluso puedan practicar algunos de los "movimientos" con los niños de antemano. Así, el día de la sesión, ya saben lo que les voy a pedir que hagan. Todo lo que necesito son unos pequeños ajustes. Todo resulta muy sencillo.
70-180mm, 135mm, F/4.5, 1/500 seg., ISO 800
70-180mm, 100mm, F/3.5, 1/640 seg., ISO 500
Aproveche la familiaridad que los niños de hoy en día tienen ante la cámara.
Hoy en día parece mucho más fácil que hace una o dos décadas ayudar a los niños, especialmente a los preadolescentes y adolescentes, a relajarse delante de la cámara. Hay que tener en cuenta que se trata de una generación que ha crecido posando para selfies en sus smartphones, para plataformas como Instagram y Snapchat. Así que si tienes la sensación de que a tus sujetos les gusta dar caña delante de la cámara, pídeles que te muestren su "mejor cara". Estarán encantados de hacerlo, todos se relajarán y conseguirás retratos naturales y auténticos en los que los niños se sentirán protagonistas.
28-75mm, 35mm, F/2.8, 1/640 seg., ISO 250
Para ver más fotos de Felipe Prieto, echa un vistazo a su Instagram.