Por Jenn Gidman
Imágenes de Scott Stockton
Tamron 35-150 mm F/2-2,8 de Scott Stockton Di III El zoom VXD le ayuda a conseguir un estilo fotoperiodístico no intrusivo en sus bodas.
Cuando Scott Stockton llega a un lugar para fotografiar las nupcias de una pareja, hace tiempo que les ha revelado que es un poco "cabeza hueca". En el período previo al día de la boda, ya sea en la sesión de compromiso o en otras reuniones de planificación, el fotógrafo afincado en Charlotte, Carolina del Norte, se asegura de que se sientan completamente cómodos a su alrededor para poder captar mejor sus personalidades cuando por fin se den el "sí, quiero".
"Soy muy cariñoso, extrovertido y divertido, para que el día de la boda sientan que pueden hacer cualquier cosa -incluso algo muy cursi y romántico- y no se sientan raros por ello", dice Scott. Este enfoque es clave para un estilo fotográfico que él describe como fotoperiodístico, en el que simplemente intenta captar los acontecimientos del día tal y como se desarrollan ante él. "No me gusta entrometerme ni interrumpir los momentos especiales que están sucediendo delante de mi cámara", dice. "Por eso necesito un objetivo versátil que me permita no entrometerme mientras se desarrolla la celebración".
Últimamente, ese objetivo ha sido el Tamron 35-150 mm F/2-2,8 Di III VXDque ha sustituido a los múltiples objetivos que solían acompañar a Scott en todas sus bodas. "Utilicé ese objetivo solo para la gran mayoría de las bodas que se documentan aquí", afirma. "Solía llevar una bolsa colgada de la espalda con todos mis objetivos, así que ha sido estupendo deshacerme de ese peso extra. También me encanta que sea el único objetivo zoom que empieza en F/2 para mi sistema de cámara sin espejo Sony. Es muy útil en situaciones de poca luz, como ocurre a menudo en las bodas, y cuando hago fotos de detalles y quiero crear desenfoque en el primer plano o en el fondo para conseguir un efecto creativo".
35-150mm (91mm), F/4.5, 1/320 seg., ISO 500
Situar la escena en lugares especiales y añadir esas fotos de detalle ayudan a contar una historia más completa del gran día. "Por ejemplo, si estoy fotografiando una boda en un destino, suelo intentar mostrar algo de ese destino para completar la selección", dice. "Busco una arquitectura única o, por ejemplo, las calles adoquinadas por las que es conocida una ciudad, y las incorporo a las fotos. Ayuda a la pareja a rememorar mejor ese día cuando miran su álbum de boda años después. Y, por supuesto, siempre es agradable ver una foto del vestido de la novia, o de la invitación de boda".
35-150mm (35mm), F/2, 1/250 seg., ISO 250
Mientras la novia se prepara, Scott intentará destacar no sólo a ella, sino también sus relaciones con sus allegados. "Me he dado cuenta de que cuando las parejas piden fotos, nunca son las que yo espero", dice. "Sus imágenes favoritas siempre giran en torno a las personas a las que quieren: fotos de familia en grupo, riendo con sus amigos, abrazando a gente que hace tiempo que no ven. Es muy importante que sus seres queridos estén presentes cuando dan el siguiente paso épico en sus vidas. Por eso me desvío de mi camino para captar a la amiga de la novia ayudándola a maquillarse, o a un grupo de personas acurrucadas conversando en la recepción, o a la novia con su madre mientras se prepara. Miras una foto así y sabes que probablemente han pensado en ese día toda su vida, y ahora aquí está".
35-150mm (35mm), F/2.2, 1/400 seg., ISO 400
35-150mm (35mm), F/2, 1/640 seg., ISO 1250
Acordarse de incluir al novio en las fotos en solitario también está en la lista de tareas pendientes de Scott. "Los novios tienden a caer en el terreno de los olvidados, pero para ser sincero, muchos de ellos no quieren estar demasiado delante de la cámara de todos modos", dice. "Así que suelo tantear al novio para ver si está dispuesto a dedicarme más tiempo. Le alejo de sus padrinos, le pregunto si quiere tomar algo (sin dejarme llevar) y luego busco una buena iluminación para colocarle". En la foto que veis aquí, el local tenía grandes ventanales, así que acerqué una silla a uno de ellos, le hice sujetar su bebida e intenté que sonriera con algunas bromas".
35-150mm (35mm), F/2, 1/640 seg., ISO 400
Cuando llega el momento de dirigirse a la ceremonia y la recepción, Scott se asegura de capturar las fotos que todos los recién casados suelen querer que acaben en sus álbumes: los pasos por el altar, los primeros bailes, el corte de la tarta. Pero también intenta buscar formas únicas de documentar a los seres queridos que vinieron a compartir el día especial de la pareja. "Para la foto que ves aquí de la elegante abuela en la ceremonia, sonriendo en su asiento, la vi por casualidad cuando caminaba detrás de dos padrinos", dice. "Me encanta añadir capas a fotos como ésta, con objetos en primer plano para que la imagen sea un poco más llamativa. Una vez más, esa es la belleza de ese objetivo 35-150. El hecho de que pueda ampliar cuando lo necesito y luego acercarme para tomas como esta hace que sea muy fácil utilizar un solo objetivo para toda la ceremonia."
35-150mm (35mm), F/2, 1/800 seg., ISO 800
35-150mm (129mm), F/2.8, 1/800 seg., ISO 800
Al final, el éxito de una boda, desde la perspectiva de Scott, se debe a sus esfuerzos por mantener a todo el mundo relajado, cómodo y divirtiéndose. "En esa foto de la novia y las mujeres de su cortejo nupcial, había pedido a alguien que hiciera un brindis con champán, y nadie se pronunciaba", dice. "Así que cambié de marcha y dije: 'Vale, a la de tres, que todo el mundo diga '¡Yas reina! Así que conté y todos lo dijeron, y todo el mundo empezó a reírse. Excepto esa niña, que parece que está pensando: 'No estoy segura de lo que significa, no voy a decirlo'. Pero en cuanto a las fotos de grupo en general, cuanto más sueltos los tenga, más bajarán la guardia y serán ellos mismos conmigo. Es entonces cuando sé que voy a sacar unas fotos estupendas".
35-150mm (65mm), F/2.5, 1/400 seg., ISO 400
Para ver más obras de Scott Stockton, visite https://scottstocktonphotography.com.